Sunday, January 29, 2006

UNO

UNO nunca sabe cuando le va a tocar hacerse el paisa. Ni siquiera paisa de quién. Yo tampoco sabía lo del queso paisa. Ya sabes, que no es un tipo de queso paisa, sino una marca de queso “Paisa”. Pero eso nos paisa a todos. Porque a todos nos gustan los paisajes. ¿No te ha paisado? Bueno, el asunto es que me tocó ese día. El día de los inocentes. Los Santos Inocentes. Pero ¿quiénes son los inocentes? ¿Los que no le hacen daño a nadie? Entonces, no son humanos, por eso son Santos. Santos Inocentes. Porque si no fueran inocentes, no serían tan santos, que digamos. Digamos que ese día era uno cualquiera, sin santos ni inocentes. Me dirigía a donde siempre me dirijo, a donde el director, el que dirige. Me dirigí a él y le pregunté si le gustaban las zanahorias.

DOS meses más tarde, aún recuerdo que no. Que no recuerdo lo que me pasó hace dos meses. Es difícil explicar cuando a uno se le pierde un día de la semana, como si fueran las llaves; éstas, al igual que los días, siempre deberían estar en el mismo sitio, donde las dejamos. Pero a mí ese jueves se me perdió y ya lo relaté en otro cuento, así que no viene al caso. El caso es que ese día no era jueves. Era otro cualquiera, que no era santo ni inocente, ni comí queso paisa. Pero lo recuerdo como si fuera ayer. Tal vez, porque fue ayer, precisamente. Que me empecé a preguntar por qué los días tienen que ser iguales. ¿Por qué los años cambian de número, avanzando, y los días siempre son los mismos?
Siempre volvemos al principio, y eso da la sensación de que no vamos a ningún lado. ¿No?

TRES días después me doy cuenta de ello. Cuando arribamos al domingo, creyendo que hemos llegado al final, vuelve a empezar la cosa igualita. Como si hoy o mañana no importara, como si todo fuera lo mismo, menos nosotros, con nuestras canas, arrugas y achaques. Por lo menos, deberíamos tener el consuelo de que los días fueran diferentes. Llamarlos aunque fuese Lunes1, Martes2, etc. Eso le daría un carácter “humano” y por lo tanto perecedero a nuestra semana, y entonces tendríamos más conciencia de que “el tiempo pasa”. Por ejemplo: “No puedes seguir bebiendo hasta el amanecer. Recuerda que hoy es viernes51. Eso era cuando estábamos en viernes32.” Sería un poco cruel, pero más real, y más decente, definitivamente. Es una idea.

CUATRO veces al día me miro al espejo y le pregunto quién soy. Pero él no me responde, así que lo dejo así, hasta que se me vuelve a ocurrir y lo vuelvo a hacer. Pero el espejo es sólo una parte de mí que se refleja, plana, sin emociones, sin mis rasgos más particulares, que son los de mi carácter, los que precisamente no se ven a simple vista. Pero una simple vista es lo que uno espera de un espejo. No que te lea el pensamiento, ni te adivine las ganas, ni te diga quién es la más bonita del reino. En el reino de la confusión los confusos llevan las de ganar, porque se entienden con ella, se la llevan, se retroalimentan y por eso siguen siendo así, confusos en la confusión. Suena ridículo analizar el caos, es más sensato estudiar el orden y qué lo hace tan perfecto, tan ordenado. ¿No les parece?

29-11-99

2 Comments:

Anonymous Anonymous said...

what does Paisado mean in spanish. In some other languages it means pay money, money transfer or simply Pay

ask me

2:52 PM  
Blogger Marianella Alonzo said...

There's no meaning in Spanish. It's just a wrong way for saying "happened". The right way is "pasado". For example: What has happened to you? ¿Qué te ha pasado? In this case, I use it like "¿qué te he PAISADO?". It's a game of words based on the trademark cheese "Paisa". I hope you understand.

3:14 PM  

Post a Comment

<< Home